"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Opinión
En la buena dirección
Con otra mirada
Por José Manuel González Huesa, director de “cermi.es semanal” y director general de Servimedia
03/06/2016
“Virginia, una joven con síndrome de Down, se cita siempre vestida de rojo con hombres desconocidos con los que contacta por Internet. En el parque conoce a Pedro, un chico adolescente que pasea a su perro y con el que iniciará una particular amistad”. Hasta aquí puedo leer de Los perros no van al cielo, una comedia negra sobre la autonomía emocional de las mujeres Down y las dudas que surgen en torno a la educación tanto en el núcleo familiar como en la sociedad.
Esta es una de las obras del festival “Una mirada diferente” que durante el mes de mayo se ha celebrado en Madrid, en el Teatro Valle-Inclán del Centro Dramático Nacional, bajo la dirección de Ernesto Caballero. Este festival, bajo el lema “Déjate contagiar”, pretende insistir en la idea de que “el miedo a la diferencia sólo se pierde por contacto directo con ella”. Teatro, música, lectura dramatizada, danza, encuentros con el público y para profesionales… Obras de autores y artistas del Reino Unido, Italia, Argentina y España.
Los profesionales y el público se contagian del valor artístico de la diferencia participando en los diferentes proyectos de este encuentro artístico. Incluso se ha creado un área de investigación y análisis que pretende fomentar la inclusión para comprender la diversidad e incentivar a los profesionales de las artes escénicas para trabajar con diferentes artistas.
Otro ejemplo. Pascal Kleiman es el protagonista del documental No hacen falta alas para volar. Nació sin brazos y ahora llena las pistas de baile como dj de música techno. Ha recorrido salas de Estados Unidos, Rusia, Israel, Francia, España… es un espectáculo verle en acción. Y contagia optimismo y creatividad al derribar barreras, donde se mezcla el creador con el espectador.
La cultura es fundamental para conocer la diversidad que existe en nuestra sociedad. Y a la diversidad no hay que tenerle miedo. Es un valor añadido. Este “viaje a ciegas” del arte se enmarca en la Bienal de Arte Contemporáneo que la Fundación ONCE promueve desde hace años. En esta ocasión celebra su VI edición que complementa con un programa de actividades paralelas, tanto de formación como de ocio, accesibles para todos. Habrá talleres, conferencias, ciclos de artes escénicas (danza, cine y teatro) y proyecciones de películas, en colaboración con el Centro Dramático Nacional, la Academia de las Artes y de las Ciencias Cinematográficas y la Casa Encendida.
Estas son algunas de las actividades en las que se acercará al público el trabajo de compañías de danza y teatro inclusivo que cuentan, entre sus actores o bailarines, con personas con discapacidad, tratándose en todos los casos de grupos profesionales.
El eje central propuesto para esta edición de la muestra es 'La tecnología en el arte'. Gracias a la tecnología, las personas con discapacidad pueden acceder al arte en igualdad de condiciones que los demás, como creadores o espectadores, con aplicaciones, soluciones técnicas y científicas.
De los 31 artistas nacionales e internacionales que exponen en esta muestra de arte accesible, más del 50% (16 en total) tienen alguna discapacidad. Podrá visitarse en CentroCentro Cibeles (Madrid) hasta el 11 de septiembre. Esta iniciativa pretende reconocer y difundir la obra de artistas con discapacidad o de quienes encuentran en la discapacidad su inspiración para hacer arte. Creación sin barreras.